DON SHACA, TODO UN SEÑOR
Su nieve sempiterna
tan llena de bondad
crea el marco de la límpida mirada
que ufana adorna
su rostro patriarcal.
Su mano extendida al alcance de todos,
su don de gentes;
su entrega, su derroche de amistad,
su palabra docta, orientadora y comprensiva
alumbraron caminos, enrumbaron vidas.
Su jaranera experiencia tristezas disipó,
su erudición del pasado
la historia del pueblo
entrañablemente amado revivió.
Todo él resumía
el ideal de un pueblo amado:
un hombre cabal, probo y de raíces profundas.
Todo él expresaba
el ideal de un país dolido:
un profético maestro y
de la educación apóstol.
Todo él resumía
el amor telúrico que todos queremos sentir.
Todos sus gestos, sus sueños, sus añoranzas
sintetizaron EL SER
que
todo socotino DEBE SER.
carhuare
Piura, 9 de abril de 2006